viernes, 1 de agosto de 2008

La ecología como resultado del análisis económico

Os pego este artículo de expansión:

http://www.expansion.com/edicion/exp/mercados/es/desarrollo/1150425.html

Un fondo ecologista en Londres

Publicado el 27/07/2008, por Roberto Casado

Pierre Lagrange es una de las personas más acaudaladas del sector financiero de Londres. Según la lista de las personas más ricas de Reino Unido que elabora The Sunday Times, el belga Lagrange (46 años de edad) tiene una fortuna valorada en 460 millones de libras (575 millones de euros).

Además de poseer una participación en GLG Partners, el hedge fund que estableció junto a dos socios en 1995 y que cotiza en Nueva York, Lagrange se encarga de la gestión de los activos de esa entidad.En una de las pocas entrevistas que concede, Lagrange (quien rechaza ser fotografiado) explica su nueva estrategia para que GLG Partners gane más dinero: ser ecologista. “El cambio climático va a ser como Internet, en el sentido de que va a cambiar el modo de hacer negocios de todas las compañías, en todos los sectores”, explica Lagrange en su oficina londinense del selecto barrio de Mayfair, donde trabaja en vaqueros y sin corbata, lejos de la estética de los ejecutivos tradicionales de la City. Desde allí, GLG Partners maneja inversiones de sus clientes valoradas en 24.000 millones de dólares, que coloca a través de fondos en múltiples valores por todo el mundo.La estrategia medioambiental de Lagrange no consiste en apostar por empresas de energías renovables, sector donde considera que existe el peligro de una burbuja de precios. Su idea es invertir en firmas de cualquier sector con un menor impacto en el cambio climático que sus rivales. Electricité de France (EDF) e Iberdrola en el sector eléctrico; Iberia entre las aerolíneas; Swiscomm, Telenor y BT en las telecomunicaciones; Inditex, H&M y French Connection en la distribución; Aegon, Swiss Re, Standard Lige y AGF entre las aseguradoras; Total y Statoil en el sector petrolero; y Nopec Geophysical y Compagnie de Geophysique-Veritas entre las firmas independientes de exploración de hidrocarburos; figuran entre las empresas que baten la media de sus sectores en cuanto a eficiencia medioambiental, según los análisis realizados por GLG.Ser más verde va a traducirse en más rentabilidad, según Lagrange, “porque en diez años, muchas empresas tendrán que internalizar los costes vinculados al medio ambiente”. Pagar por las emisiones de dióxido de carbono (CO2) será algo habitual, y las firmas que consuman más energía y agua y generen más residuos serán penalizadas. Las más eficientes en ese terreno serán más rentables, según GLG. Lagrange se apoya en un informe de la consultora McKinsey que indica que una inversión global de 170.000 millones de dólares anuales en los próximos trece años en la mejora de la “productividad energética” en el mundo puede generar una rentabilidad del 17%.GLG ha hecho su propio análisis, junto a la consultora Trucost, más centrado en el plano bursátil. Pierre Lagrange explica que, según ese estudio, “el valor actual de los costes medioambientales que las empresas europeas cotizadas tendrán que asumir equivale al 3,4% de su capitalización bursátil, algo que todavía no tiene en cuenta el mercado”.Para tomar posiciones en las empresas que se verán menos afectadas por ese coste, GLG lanzó el año pasado un fondo específico, que invierte a largo plazo en las sociedades cotizadas que mejor huella medioambiental tienen respecto a sus rivales. “El GLG Environmental Fund superó en un 7% la evolución del mercado bursátil europeo entre marzo y diciembre de 2007, mientras que durante 2008, ha mejorado en un 5% la marcha de la bolsa”, afirma.El ejecutivo explica que este fondo “no ignora ningún sector. Invierte en empresas que, además de ser atractivas por su valoración o sus fundamentales [perspectivas de beneficio], tienen menos emisiones de CO2 que sus competidores y presentan una alta eficiencia energética o utilizan tecnologías limpias”. Otros fondosAdemás de ese fondo específico, que maneja unos 150 millones de dólares, GLG Partners gestiona un instrumento creado por Richard Branson, el dueño de Virgin Group, para invertir en empresas verdes en bolsa. Otros fondos de GLG, con ocho mil millones de dólares en activos, también añaden el análisis medioambiental como uno de los factores antes de tomar decisiones.Pierre Lagrange ha llevado su filosofía a organismos internacionales, al participar en actos de la Organización de Naciones Unidas (ONU). Actualmente, una de sus peticiones a los reguladores es que se obligue a las empresas “a dar información sobre su impacto ecológico, mediante la creación de una especie de principios contables del medio ambiente”. Esos datos facilitarían las decisiones al invertir, explica el cofundador de GLG, quien no opina sobre los asuntos más polémicos acerca del cambio climático, como el futuro de la energía nuclear o los biocombustibles. “No entro en ese debate”, dice Lagrange. Su ecologismo no es una doctrina, sino el resultado de un análisis económico.