lunes, 6 de septiembre de 2010

La izquierda francesa apoya la marcha a Bruselas

Partiendo, el 14 de agosto, desde Zaragoza, políticos y activistas de sindicatos, asociaciones y organizaciones de Aragón (España) marchan hasta Bruselas, donde ellos y ellos llegará justo antes de la jornada de lucha europea del 29 de septiembre. Desde la frontera con Francia, el 22 de agosto, nuestras organizaciones participan enesta acción internacional y trabajan para su éxito a través de los diferentes pasos (acogida y logísticareuniones públicas, eventos locales, etc.). Nosotros nos incorporaremos a la llamada de nuestros compañeros de clase de España.

Caminamos contra la dictadura de los mercados y los gobiernos a su servicio, contra el pesimismo
que nos inculcan, contra la lógica de la capital. Otra economía es posible: basado en compartir la riqueza, el trabajo, el derecho a la salud, la educación y la vivienda; sin hacer pagar la crisis
a los inmigrantes.

Las huelgas y manifestaciones de 7 de septiembre en Francia, las movilizaciones europeas de 29 de septiembre son un nuevo paso después de la respuesta inicial en diferentes países, especialmente en Grecia. A la crisis del sistema capitalista, ecológica, económica y financiera, nosotros queremos imponer una solución popular y social.
Caminamos contra la explotación de la clase obrera contra la destrucción y la privatización de todo lo que es público en Europa. Vamos al Parlamento Europeo, para llevar nuestros requisitos: nosotros queremos construir la Europa de los trabajadores europeos y los ciudadanos.
Caminamos también contra las reformas antisociales del Gobierno francés, incluyendo el proyecto de la Ley de pensiones del que exigimos la retirada. Con otros en Europa, aplica una política de rigor para los empleados, los jubiladoss, los jóvenes, los desempleados . Su política sólo favorece a los ricos y, a pesar de sus promesas, aborda los parísos fiscales ni el fraude fiscal.
No molestan a los responsables de la crisis, ni a los banqueros, especuladores ni millonarios que han jugado con el dinero público. Prefieren atacar a los inmigrantes. Que ellos sean las primeras víctimas que paguen el pato de la crisis.

NO NOS RENDIREMOS.
SI NO LUCHAMOS, NOS VAN A ROBAR TODO.
TODOS A LA CALLE. AHORA O NUNCA

ORGANIZACIONES FIRMANTES

Union Syndicael Solidaires
Marchés Européenes
Nouveau Parti Anticapitaliste(NPA)
Fedération pour une Alternative Sociale et Ecologique (FASE)
Alternative Libertarie (AL)
Asociation pour l´Emploi, l´information et la Solidarité des chômeurs et travailleurs précaires
Centre d´etudes et d´initiatives de solidarité internationale(CEDETIM)
Confédération Nationale du travail (CNT)
Agir ensamble contre le chômage !AC!

domingo, 5 de septiembre de 2010

Lo que la crisis se llevó

El diario español El País abría hoy con el siguiente titular: “El 73% de los trabajadores cree que no hará la huelga general”. Este dato está sacado del barómetro que Metroscopia hace regulamente y en el que se pregunta también por la percepción de la crisis y por la situación política en general. No pretendo hacer un análisis exhaustivo de la encuesta, pero hay datos en ella que llaman poderosamente la atención. Sobre todo, porque no es la primera vez que aparecen.

En primer lugar, el titular de portada respecto a la Huelga General llama la atención. Estamos asistiendo, probablemente, a lo que dentro de unos años los historiadores llamarán un cambio de ciclo - si no el final - del Estado del Bienestar. En la ya clásica contradicción capital / trabajo, el capital gana terreno, mientras que el trabajo paga una fiesta que, si bien disfrutó, desde luego, no organizó. Sin embargo, las y los trabajadores, no se muestran dispuestos a secundar la Huelga General, pese a que el 54% piensa que está justificada. Los argumentos esgrimidos (no aparecen en la encuesta, pero sí se oyen en las calles), de dos tipos: unos aluden a la inevitabilidad de las medidas adoptadas por el PSOE, recordando que en todos los países europeos se están haciendo reformas similares. Otros, a la escasa credibilidad de los sindicatos, que están viendo cómo se cuestiona el papel que, hasta ahora, han jugado en la sociedad europea.

Pero si seguimos con la encuesta, el siguiente apartado pone de manifiesto que los dos principales líderes políticos, el presidente del Gobierno JL Rodriguez Zapatero, y el líder popular Mariano Rajoy, suspenden clamorosamente en la valoración que se hace de ellos, al tiempo que los encuestados manifiestan mayoritariamente que les inspiran poca o ninguna confianza.

Finalmente, ante la afirmación “Que el actual gobierno socialista lo esté haciendo mal, no significa que un gobierno del PP lo fuera a hacer mejor,”, el 77% de los encuestados se muestran de acuerdo.

Ya sé que estos datos no aparecen por primera vez, y también conozco las limitaciones analíticas de este tipo de encuestas, pero hay cosas que no se pueden dejar escapar: en una crisis que algunos calificamos de sostenibilidad (económica, social y ambiental), otros de crisis “sistémica”, y unos y otros coincidimos en que es una crisis global y de enormes dimensiones, los instrumentos básicos de la democracia representativa, también están en cuestión: Ni los líderes políticos inspiran confianza, ni parecen capaces de sacarnos de este lío, ni los canales de representación y lucha de los trabajadores tienen el respaldo que se les supone en la calle.

De esta crisis se está hablando y escribiendo mucho; sobre todo, de sus enormes dimensiones y su profundidad, pero mucho me temo que aún no somos conscientes de lo que puede llevarse por delante.